Cabecera del Cárdenas entre el vendaval ( ni Pancrudo, ni la Cuña)



Vistas al valle del Cárdenas tras salir del hayedo.


Ruta seguida aproximadamente. 
En Rosa lugar donde dejamos el coche.
En Rojo ruta de ascenso.
En Azul los descensos.
En Blanco los picos con mejor acceso y esquiada desde esta parte alta del valle.



Pantallazo del Track grabado, salen 12 km de recorrido y +- 1100 m. de desnivel.



Track extraído de internet con un Ruta de ascenso similar a la nuestra, hasta el Collao Nestazar (Artaza en el mapa ) desde el cual se puede subir tanto al pico Cabeza Parda, al San Lorenzo, como al Pancrudo, para realizar los mejores descensos de la zona.



Aunque nuestra idea inicial era ir a la cara Este de la Cuña, visto el gran viento presente en altura, decidimos buscar la protección de las hayas en la norte del Pancrudo.


Salimos con los esquís puestos desde la cota 1150, junto a la fuente.
Seguimos la pista hasta llegar a la primera curva, donde continuamos por el barranco que baja de la Cascada.


Tras descalzarnos varias veces los esquis para cruzar el barranco, llegamos a la Cascada.



Desde aquí no seguimos la pista, atajamos en dirección Sur por el hayedo.

Conforme ascendemos la nieve tiene menos  humedad.



Cruzamos 2 veces la pista.


Seguimos por el lomo de los tejos.

Y tras pasar la GR que va de Valvanera a Ezcaray, seguimos ganando altura hasta salir del hayedo.

Visto el viento que hace, quitamos pieles e iniciamos el descenso.


Al principio con buena nieve.

Disfrutamos de apenas 250m. de desnivel, por lo que volvemos a realizar otra subida y bajada aprovechando nuestra huella.



Vistas de la Norte del Pancrudo.


Cara Este del Cabeza Parda y lomo al cual nos dirigiremos, para el último descenso.



Tras almorzar, ponemos las pieles y esta vez sí que seguimos la pista, hasta llegar a la parte alta del barranco de la Cascada.


Las acumulaciones de nieve en este barranco son increíbles.



Nos cruzamos con estas huellas, de algún lobo solitario.

La cabecera de este barranco es un embudo erosionado con mucha pendiente, lo cual dificulta nuestra salida.

La zona superior es más tendida, pero a cambio nos recibe el vendaval.
Por ello buscamos la divisoria que baja del Cabeza Parda.

Dejamos atrás el collado Nestazar.


Y los Pancrudos.


Aprovechamos a quitar pieles, al resguardo de un pino uncinata.


Nos asomamos a ver la Este de la Cuña y Chilizarrias, que tiene gran innovación pero está muy azotada por el viento.




Iniciamos el descenso hacia el coche, buscando en el lomo la nieve comprimida por el viento, ya que por ella se esquía muy fácil.





Acabamos de nuevo en la pista, la cual tras seguirla, nos devuelve al punto de partida, donde disfrutamos de unas merecidas cervezas.




 









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